Bendito al que dijo “Pienso, luego existo”
Esa persona no tenía sentimientos, nunca sintió un impulso
por nada.
¿Sería genial no sentir nada no? Que a uno simplemente todo
le resbale.
Todo se convertiría en algo más fácil. Vacío, pero sencillo.
Pero esa sencillez se transformaría en monotonía, y uno se
aburriría.
Entonces, ¿qué quiere uno? No sé, ser feliz y nada más, paz
y tranquilidad, tal vez?
Para eso hay que pensar primero, Ja! Ahora entiendo la
frase, pero es tan difícil!
Pero…es lindo no pensar y entregarse también, uno no puede
ser calculador con todo.
Alguna reflexión con todo esto? No, un mar de confusiones me
atormentan. Quizás, lo que se pueda rescatar es que un equilibrio con todo es
la respuesta.
Premio al que lo logre, Ja!
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